Hace algunos años había cierto recelo por cómo se desarrollarían las artes digitales, parecía que ciertos oficios y técnicas estaban en peligro de extinción en favor del mundo digital y los materiales sintéticos. Afortunadamente, las nuevas generaciones de artistas muestran una agradable curiosidad por la artesanía y el «hazlo tú mismo». Aparte de resultar muy atractivo para los que han nacido con un ordenador bajo el brazo, es sin duda el mejor antídoto contra la piratería y la gran baza de los nuevos artistas.

Estos toys de madera tallada son un buen ejemplo. Hechos a mano con materiales naturales y de edición limitadísima, son agradables a la vista, al tacto y al espíritu. Y seguro que hasta huelen bien.

En dos estilos totalmente diferentes, uno más estilizado y sencillo; el otro con un encanto primitivo delicioso basado en la tradicional talla de la isla de Java.