Si sois usuarios de los juegos de Disney Infinity, seguramente ya habréis descubierto las posibilidades de mezclar mundos y personajes. Un ejercicio que, aparte de ser muy divertido, conecta con ese espacio misterioso e indeterminado del crossover que puede traer muchos dolores de cabeza a los fans más fanáticos sobre las posibilidades narrativas o incluso implicaciones filosóficas:
Pero lo que verdaderamente me parece fascinante de este juego es cómo se exprime las posibilidades del diseño de personajes. Veamos esta progresión con el personaje de Han Solo.
1.- Han Solo es un personaje de ficción interpretado por Harrison Ford:
2.- Esta es una caricatura del personaje, un concept art que busca un nuevo estilo visual:
3.- Esa caricatura se transforma en una figura tridimensional, que se fabrica en serie y que funciona como simple muñeco decorativo:
4.- Pero además esa figura tridimensional habita de modo virtual dentro de un videojuego donde adquiere animación, ya sea en escenas narrativas independientes o en modo de bucles consecutivos controlados por la acción del jugador:
Y aunque esta diversificación de un personaje no es nada extraño, ya que hoy en día todas las películas de animación o cualquier blockbuster siempre van acompañadas de merchandising o juegos, en el caso de Disney Infinity
El ejercicio progresivo de desarrollo del personaje
Caricatura – Figura – Muñeco – Animación – interactividad
se concibe a priori como un todo.
Lo que da una gran solidez al proyecto y exige una coordinación simultánea de diferentes empresas, productoras, artistas y programadores. ¿Será el diseño lo suficientemente fiel al personaje? ¿Es viable su construcción en serie? ¿Es compatible con la acción y la jugabilidad? Todos estos factores se tienen en cuenta a la vez. Pensad en ello.
El especial de Game Informer sobre Disney Infinity 3.0 aquí.
Y la opinión de Chewbacca sobre todo esto, aquí.