El artista y diseñador Mark Pernice ha tenido una genial idea para promocionarse.
Basándose en un autorretrato fotográfico distorsionado, ha creado un modelo tridimensional con el que se ha fabricado una máscara, que se ha colocado para, de nuevo, autorretratarse en fotografía.
Un ejercicio de auto-caricatura corpórea estupendo.


